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Entre abril y septiembre, periodo que se corresponde con el primer semestre de su actual año fiscal, Toshiba facturó 146,6 millones de euros, es decir, un 3% más que los ingresos que obtuvo en el anterior semestre. Así las cosas, el fabricante prevé finalizar su presente ejercicio, que cerrará el 31 de marzo de 2009, con unas ventas de 380 millones de euros, lo que supondrá un crecimiento en torno al 5%.

De momento, los incrementos del primer semestre tienen su base, sobre todo, en el segmento profesional, donde Toshiba creció un 40%. Pero para los próximo meses la compañía se guarda un as en la manga que podrá espolear sus ventas entre el mercado de consumo: los portátiles de bajo coste.

Y es que, el fabricante acaba de anunciar que en noviembre presentará su propio modelo de ‘netbook’, que llegará al mercado a un precio de 390 euros y en dos versiones de 120 y 160 GB.

Además, la firma continuará manteniendo su estragia de no entrar en guerras de precios y de mantener la calidad y la inclusión de novedades y exclusivas como diferencial frente a la competencia. “Cada vez que hay una crisis -apunta Alberto Ruano, director generla de la compañía-, la mejor forma de salir de ella es ser tecnológicamente diferentes en vez de bajar precios”.