El canal es la principal fuente de valor en el SaaS
Tradicionalmente, el software se adquiría y era instalado en un PC o en un servidor dentro de una red local. Pero ahora existen otras alternativas como el Sofware as a Service (SaaS), que ofrecen mayor flexibilidad a los usuarios puesto que éstos tienen la posibilidad de pagar por el “alquiler” del software en base a una cuota mensual o anual. De esta forma, el software está disponible bajo demanda y es actualizado inmediatamente si hay algún cambio en los requerimientos de seguridad.
Principalmente, el SaaS ha permitido la evolución del software de un “producto” a un “servicio”. Este cambio también es conocido como “hosted” o servicios “in the cloud” y supone un incremento significativo del valor y de las ventajas competitivas para las corporaciones y para el canal de distribución, tanto en términos de inversión inicial como de administración de la solución.
Un modelo SaaS también puede incrementar la calidad y eficacia de la solución y ofrecer ahorros y mejoras en estas áreas, redundando en un mejor ROI comparado con las soluciones tradicionales bajo licencia. Debido a la naturaleza dinámica del SaaS, éste puede adoptar múltiples formas: email hosted, seguridad de mensajería hosted, archivado de email hosted, seguridad de servidores hosted, etc. Teniendo en cuenta esta evolución, se tiende a que la mayoría de las ofertas bajo licencia tengan una variante hosted en los próximos años.
Tal y como hemos comentado, un ciclo de venta más corto conlleva menor tiempo invertido en procesos de negociación, implementación y mantenimiento y, lo que es más importante, minimiza costes. Como el SaaS tiene todo o parte del servicio alojado en el proveedor de servicios o el fabricante, esto elimina los costes iniciales que una solución por licencias requiere, como puede ser la inversión en el hardware del servidor. También supone mayor agilidad en el despliegue y, por tanto, de nuevo se reducen los costes de la instalación inicial.
Dada la actual situación de crisis por la que atraviesa la economía y los inconvenientes que está generando en la liquidez de muchas empresas, el modelo SaaS se convierte en el más indicado. A medida que los negocios crecen y se escalan operaciones es más fácil ajustarse a los cambios cuando se utiliza una solución SaaS, pues el usuario simplemente incrementa o disminuye el número de asientos de la suscripción.
Por lo general, las soluciones por licencia conllevan gran cantidad de requerimientos de administración. Con SaaS, éstos ahora son gestionados por el proveedor de servicio o el fabricante obteniendo así ahorros de costes porque se requiere menos personal para administrar estas soluciones. Un beneficio adicional es el que aporta la experiencia del proveedor. Pongamos por ejemplo las ofertas anti-spam. En el caso de las soluciones por licencia, siempre necesitan ser ajustadas de forma local para conseguir la máxima protección debido a la naturaleza cambiante del spam, mientras que cuando se trata de un servicio alojado, el fabricante o el proveedor modifican y mejoran continuamente la precisión de la identificación del spam, con cambios en las configuraciones y ofreciendo niveles exactos y apropiados de detección. Este modelo también ofrece mayor fiabilidad que las ofertas tradicionales, ya que quien presta el servicio generalmente ofrece acuerdos de nivel de servicio (SLA) que contemplan la compensación económica al cliente cuando se producen tiempos de inactividad.
Por supuesto, el canal de distribución también se beneficia del SaaS, toda vez que los distribuidores se convierten en parte fundamental para dar a conocer las oportunidades tecnológicas y de negocio asociadas a este sistema, así como para garantizar una relación comercial sólida y efectiva. Ahora, los partners cuentan con una nueva alternativa de desarrollo de negocio, ya que pueden brindar un servicio de valor añadido crítico no sólo en las tareas de consultoría y asesoramiento a la hora de ayudar al cliente a elegir qué posibilidad y servicio se ajusta más a sus necesidades desde el punto de la configuración del software, sino también en el mantenimiento y duración de la licencia.
Mayor eficacia en la gestión, inmediatez y flexibilidad en el proceso de despliegue y, por tanto, rápida disponibilidad y manejo sencillo, además de contar con un servicio ágil que permite importantes ahorros de costes, son otros de los beneficios asociados al SaaS.