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Intel ha liderado el mercado de los microchips durante años y con una gran diferencia frente a las demás empresas del mercado. En la década de los 90 consolidó su marca siendo el más usado por los fabricantes de ordenadores durante años.

Ahora, la situación ha cambiado y los smartphones se venden más que los ordenadores. Además, se espera que en un futuro los tablets vayan ganando mercado, desbancando a los PC. Con la nueva situación ¿conseguirá Intel seguir manteniendo su posición dominante en el mercado?

Por ahora, los fabricantes de los nuevos dispositivos están optando por chips de Nvidia, Qualcomm y Marvell. Y las empresas están luchando para conseguir dominar el mercado con productos interesantes adapatados a los nuevos hardware, del mismo modo que Intel consiguió hacer en los años 90.

La principal lucha se lleva a cabo en velocidad. Las empresas de microchips quieren tener los más rápidos y, además los que sean capaces de rendir durante más tiempo, teniendo en cuenta que la movilidad es cada vez más importante con los nuevos dispositivos.

Según publica The New York Times, Intel ha llegado tarde a los nuevos mercados, por haberse centrado demasiado en los ordenadores.

Los analistas creen que el mayor fallo de Intel ha sido el de no conseguir chips con suficiente energía para los smartphones.

Paul Otellini, presidente ejecutivo de Intel declaró hace unas semanas que dentro de poco habrá en el mercado teléfonos inteligentes con los procesadores fabricados por la compañía.