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Nokia ha enviado un informe anual a la Securities and Exchange Commission (SEC o Comisión de Seguridad e Intercambio), en el que incluye el uso del Windows Phone en sus terminales como uno de los factores de riesgo a los que la empresa se enfrenta este año.

Aunque el fabricante finés habla en el informe de la calidad de sus terminales basados en el software de Microsoft, reconoce que está sujeto a problemas, por ser un producto nuevo, como ” la insuficiencia de incentivos de ventas, de personal de ventas capacitado, de comercialización de apoyo o la poca experiencia en la generación de intereses en un nuevo y relativamente poco conocido producto como es la plataforma Windows Phone en un mercado altamente competitivo“.

Nokia añade que los retrasos de ambas marcas en el mercado (ninguna consiguió liderar el mercado en sus inicicios) o el hecho de que los primeros productos lanzados a finales de 2011 no hayan sido considerados “óptimos” por los usuarios podrían hacer disminuir las ventas y el apoyo de operadores líderes y minoristas en los lanzamientos posteriores.

Nokia teme que los consumidores prefieran seguir elegiendo otros sistema operativos líderes del mercado, como en Android, que lanzarse a por una plataforma menos conocida y con menos experiencia en el sector móvil como es el sistema operativo de Microsoft.

Para el fabricante de Finlandia, “el actual proceso de transición a la plataforma Windows Phone puede llegar a ser demasiado largo para competir efectivamente en el mercado de teléfonos inteligentes a largo plazo, dada la evolución en curso de otras plataformas de teléfonos inteligentes que compiten”.

Según el informe, “en la elección de adopción de Windows Phone como nuestra plataforma primaria para smartphones, hemos podido renunciar a alternativas más competitivas que hubieran logrado una mayor y más rápida aceptación en el mercado de teléfonos inteligentes”.