En 2014 se habrán vendido 1.000 millones de smartphones
Las marcas más beneficiadas serán Apple, Samsung, Huawei y Nokia, de la que se espera un gran crecimiento, mientras que Motorola, RIM, HTC y Sony perderán mercado.
Según un nuevo estudio, a lo largo de 2014 se alcanzará la cifra de 1.000 millones de smartphones vendidos en todo el mundo, impulsado por el aumento de la demanda den China (supondrá el 22% de las ventas globlaes en 2 años) y por el lanzamiento de nuevos modelos de baja gama a precios asequibles.
Según el informe presentado por Credit Suisse, las ventas en todo el mundo crecerán durante este año alrededor del 46% frente al año anterior hasta llegar a ser de 687,9 millones de unidades.
Además, se cree que Apple será uno de los grandes beneficiados de este crecimiento y podría acaparar con sus iPhones nada menos que el 23% del mercado total global, “ayudado por su sólida red de distribución, software y plataforma de servicios y la innovación en hardware”, según el estudio publica por Credit Suisse.
Por otro lado, este estudio es una gran noticia para Nokia puesto que augura que la empresa se recupere dentro del sector smartphone durante el próximo año y que obtenga una cuota de mercado del 11% en un par de años. Según el estudio, las mejores características de Nokia son sus “precios competitivos y la fuerza en la marca y la distribución”.
Nokia acaba de publicar unos resultados peor de lo esperados, precisamente a causa de la caída de las ventas de dispositivos de bajo precio en los mercados emergentes, lo que ha obligado a la empresa a reducir sus expectativas de venta, según publica Reuters.
Por su parte, los analistas también espera que Samsung y Huawei ganen cuota de mercado, mientras que Motorola , HTC y Sony parecen ser marcas más vulnerables y podrían no saber aprovecharse del crecimiento del mercado. Research In Motion y sus BlackBerry también seguirían su caída de acuerdo a Credit Suisse.
Estas altas ventas son una gran oportunidad para toda la cadena de distribución, más aún cuando las operadoras podrían dejar de subvencionar smartphones, lo que haría que los dispositivos tuvieran que adquirirse directamente en tiendas dedicadas a tal labor y sin los grandes descuentos que ofrecían las compañías de teléfonos a cambio de los contratos de sus servicios.