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El mercado lleva tiempo esperando la llegada de Windows 8, y aún nos queda algo más de un mes para poder disfrutar de la próxima versión del sistema operativo de Microsoft. Entre las novedades no sólo está que llega la primera versión de Windows para procesadores de ARM, o su nuevo interfaz basado en módulos.

Otra de las novedades es que Microsoft no regalará actualizaciones, ni siquiera a los usuarios que compren un ordenador el día después del lanzamiento pero que tenga Windows 7 preinstalado. Será la primera vez que ocurre esto, pero los fabricantes se ha puesto las pilas. Esta semana, durante la feria SIMO Network que se ha celebrado en Madrid HP anunciaba que reembolsará los 14,99 euros que cuesta actualizarse a Windows 8 a los que compren un ordenador de la marca entre el 15 de septiembre y el 31 de diciembre.

Ahora es Packard Bell quien anuncia que reembolsará el coste de la actualización a Windows 8 a aquellos clientes que hayan comprado ordenadores nuevos con Windows 7 desde el 1 de octubre de 2012 al 31 de enero de 2013.

La promoción es válida para todos los portátiles EasyNote, ordenadores imedia o ixtreme de sobremesa y a los all-in-one oneTwo originalmente comprados con Windows 7 Home Basic, Windows Home Premium, Windows 7 Professional, o Windows 7 Ultimate, aunque puede consultarse una lista completa de los modelos en una página web habilitada por la compañía, desde donde también puede descargarse un formulario que permita solicitar el reembolso.

El periodo para solicitarlo va desde la fecha de disponibilidad general de Windows 8 hasta el 15 de marzo de 2013.