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Las ganancias de Symantec aumentaron un 6% en su segundo trimestre fiscal, motivadas por las fuertes ventas de su oferta en seguridad, que ha compensado la debilidad por la que la empresa atraviesa en sus dos divisiones principales, que son el consumo y la división de servidores.

Para el periodo finalizado el 28 de septiembre, Symantec registró una ganancia de 193 millones de dólares, frente a los 182 millones obtenidos en el mismo periodo el año anterior. Los ingresos aumentaron un 1,1% a 1.700 millones de dólares. Estos resultados son mejores de lo que se esperaba, según ha declarado James Beer, vicepresidente ejecutivo y director financiero de Symantec.

Mientras los ingresos de la división de seguridad se incrementaron en un 6,2%, los ingresos de sus servicios en gestión de almacenamiento y servidores cayeron en un 1,7%.

El segmento de consumo representó el 31% de los ingresos totales, cayendo en un 1%, mientras que la división de seguridad ya supone, tras el crecimiento, el 30% de los ingresos de Symantec. El grupo de administración de servidores representa el 35% del total, mientras que los servicios de la compañía representan un 4%, tras doblar sus ingresos en este año.

Para el tercer trimestre del año fiscal 2013, la empresa dice en un comunicado que espera ganancias, pero menores de las que los analistas de Wall Street habían previsto anteriormente.

La empresa está en periodo de cambios, después de que Steve Bennett pasara de ser el CEO de la empresa a presidirla el pasado mes de julio, tras la marcha, sin previo aviso, del anterior directivo Enrique Salem que tenía discordancias con los inversores sobre la manera de gestionar Symantec.

De acuerdo con declaraciones de Bennet, la empresa, bajo su mandato, busca reducir los costes en áreas que estaban perjudicando la posición de Symantec en el mercado y añadió que el beneficio del último trimestre fiscal de la compañía se debió, en parte, a los planes para impulsar el beneficio en algunas áreas en las que la compañía había cortado “erróneamente” en el pasado, como en la prestación de apoyo técnico a los productos, según publica Reuters.