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Intel ha presentado unos malos resultados económicos para el primer trimestre del año fiscal. Los ingresos de la empresa durante el mencionado periodo ascendieron a 12.600 millones de dólares y los ingresos netos fueron de 2.000 millones. Estas cifras contrastan con los 12.900 millones de ingresos obtenidos en el mismo trimestre del  pasado año y con los 2.740 millones de dólares de ganancias pasado año.

Una de las causas de la pérdida de sus ganancias en un 27% ha sido la caída de las ventas, en un 14% a causa de la continua caída de las ventas de ordenadores.

Concretamente, las ventas de la división  PC Client Group de la compañía, que supone la mayor de la Intel, cayeron un 6%, mientras que los ingresos del centro de datos se incrementaron en un 7,5% y el  otro segmento de la arquitectura Intel, que incluye chips móviles, registró unos ingresos un 9% por debajo de los de hace un año en el primer trimestre.

A pesar de esto, para tranquilizar a los analistas, Intel se ha mostrado muy positiva en cuanto al futuro. De acuerdo con Paul Otellini, presidente y CEO de Intel, “hemos enviado nuestra próxima generación de microprocesadores, hemos presentadouna nueva familia de productos para micro-servidores y lanzaremos nuestra nueva tableta y microprocesadores para teléfonos inteligentes en el trimestre”.

Añade el líder de Intel, que tiene pensado dejar su puesto en mayo, que “estamos trabajando con nuestros clientes para ofrecer productos innovadores a través de múltiples sistemas operativos. La transición a la tecnología de 14nm este año aumentará significativamente el valor proporcionado en la arquitectura Intel”, de acuerdo con el comunicado de prensa emitido por la empresa de procesadores.