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La Comisión Europea ha anunciado una inversión de 5.000 millones de euros en la industria de chips que tiene como objetivo que las empresas  de Europa sean las responsables de la quinta parte de la producción mundial y dupliquen su cuota de mercado en unos años.

De acuerdo con la nota de prensa llamada ‘New European Industrial Strategy for Electronics’, esta campaña, que acaba de arrancar,  pretende coordinar las inversiones públicas en microelectrónica y nanoelectrónica (por ejemplo en semiconductores o chips para ordenadores) con el fin de ampliar la base de la fabricación avanzada en la región.

Según Neelie Kroes, vicepresidenta de la Comisión Europea, “Europa no puede quedarse atrás mientras otros invierten agresivamente en chips para ordenadores. Tenemos que reforzar y conectar nuestros actuales puntos fuertes y desarrollar otros nuevos. Es necesaria una coordinación rápida y vigorosa de la inversión pública a nivel de la UE, nacional y regional para que se produzca esta transformación”.

Y es que la Comisión considera que “el auge del sector de la electrónica resulta esencial para el crecimiento y el empleo en Europa“.

Así el objetivo concreto sería duplicar la producción de chips en la región para situarla en torno al 20 % de la producción mundial. Para ello, el plan de la CE es aumentar la “cuantía y coordinación de las inversiones en I+D+i para maximizar el impacto de las inversiones de los Estados miembros y de la UE a través de una mayor colaboración transfronteriza (se espera que el 70 % de la inversión pública proceda de los Estados miembros y el 30 % de la Unión)”.

También destaca que la estrategia se centrará en tres líneas complementarias: abaratar los chips (transición a las obleas de silicio, materia prima de los chips, de 450 mm), hacerlos más rápidos y hacerlos más inteligentes.