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Microsoft tiene la intención de vender 16 millones de tabletas basadas en Windows en el período navideño, que es el de más ventas del año para las empresas, gracias al lanzamiento de su segunda versión de las tabletas y de la actualización Windows 8.1 que presenta las mejoras al sistema operativo que se había lanzado hace un año, y que levantó quejas entre los usuarios.

La empresa de Redmond está planeando gastar 405 millones de dólares en la comercialización al por menor de Windows este año fiscal, cifra que supone un aumento del 68% respecto al año pasado. Si desglosamos el presupuesto, 131 millones de dólares irán destinados a los incentivos y ofertas y 274 millones, se usarán para el marketing directo y para gastos operativos, según ha publicado Paul Thurrott, bloguero especializado en Microsoft.

La firma no ha querido confirmar o desmentir esta información aunque Amy Hood, directora financiera de Microsoft , sí que dijo que “estamos listos para una temporada de vacaciones increíble”.

La llegada de Windows 8.1 viene de la mano de una variedad de tabletas creadas por socios de la de Redmond, desde los terminales de 8 pulgadas de Dell, Lenovo y Toshiba, que cuestan menos de 300 dólares, hasta el nuevo Lumia de Nokia, que supone la entrada de la finesa a este mercado de las tabletas por primera vez en su historia, con el Lumia 2520 RT. Por su parte, la misma Microsoft tiene en el mercado la segunda versión de sus tabletas, Surface 2 y Surface Pro 2.

La cifra que, según los rumores no confirmados, se habría marcado como objetivo Microsoft, los 16 millones de tabletas basadas en Windows 8.1, es ambiciosa, si comparamos, por poner un ejemplo, con que Apple, principal fabricante indiscutible del mercado, vendió 22,9 millones de iPads durante el periodo de vacaciones del año pasado y ahora acaba de lanzar al mercado iPad Air y el Mini Retina que se venden en muchos países del mundo desde el pasado viernes y que podrían atraer a los clientes para los típicos regalos navideños.