El ecommerce español alcanza récord en exportación en 2014
Los países de la Unión Europea son los principales compradores en empresas de ecommerce español, las cuales podrán aprovecharse ahora de la apertura en China.
De acuerdo con el último estudio de Nominalia, el ecommerce de España ha registrado sus más altas venas al extranjero durante el 2014, frente a otros años. Concretamente, de acuerdo con las cifras recogidas a fecha del mes de octubre han mostrado un crecimiento de las ventas al exerior del 2,1% respecto al mismo período de 2013.
En cuanto a los principales mercados internacionales de productos españoles, las ventas en la Unión Europea volvieron a crecer hasta llegar a representar el 63,6% del total, siendo los países que usan la moneda euro los que más han comprando a las empresas de ecommerce españolas.
De acuerdo con el country manager de Nominalia, David Costa, empresa española de dominios, hosting y otros servicios de presencia en la red, “cabe recordar que la facturación del comercio electrónico en España mantiene un incremento sostenido próximo al 20% anual, mientras que seremos el país que liderará el ritmo de crecimiento del comercio electrónico en Europa hasta 2017″.
Por su parte, de acuerdo con datos de PayPal, la firma de pagos online que pertenece a eBay, para el ejercicio 2013 en España, las ventas internacionales supusieron el 25% de su volumen total de pagos, con un crecimiento muy superior al de su negocio interior.
Además, las empresas españolas podrán ahora beneficiarse de una nueva medida anunciada en el mercado más grande del mundo, el chino. Tal y como publicó ChannelBiz, los inversores extranjeros ya tienen permiso para operar una empresa de comercio electrónico en China. Por el momento se trata de un proyecto piloto que además sólo está activo en la Zona de Libre Comercio de Shanghai, o Shanghai Free Trade Zone (FTZ), pero es un paso para que el mundo pueda acceder a un público potencial de más de mil millones de personas.
Hasta hoy las empresas extranjeras que quisieran entrar en el país con un proyecto de comercio electrónico debían hacerlo a través de una joint venture con algún jugador local. Una regla que también se impone en otros segmentos, como el cloud computing.