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Hace un año que Intel empezó a hablar de su visión de un mundo inalámbrico en el que tanto la conexión a Internet como los periféricos o la recarga de batería se haga sin cables de por medio. Hoy, tras la presentación de la quinta generación de los procesadores Intel Core vPro, con tecnologías inalámbricas que permiten que un portátil se conecte fácilmente a pantallas y periféricos, estamos más cerca de esa visión.

Inicialmente dirigidos hacia el mundo de la empresa, los chips incorporan seguridad, más rendimiento, mejores gráficos y permiten una vida más larga de la batería. Ya hay algunos sistemas disponibles de la manos de una docena de OEM, entre los que pueden citarse a Dell, Hewlett-Packard, Hacer o Toshiba, y en diferentes formatos, desde modelos híbridos a ultrabooks.

Los nuevos procesadores vPro soportan la tecnología Pro WiDi (wireless display), que es la que permite que esos portátiles puedan conectarse a pantallas sin cables y que ofrece mejor seguridad y facilidad de uso respecto a otras tecnologías similares. Como su nombre indica, Pro WiDi va un paso más allá de WiDi, pensado para entonos de consumo y sin opciones avanzadas. Panasonic, por ejemplo, ya ha anunciado que planea integrar la tecnología pro WiDi en sus proyectores.

Junto a la tecnología Pro WiDi, Intel Wireless Docking es el elemento que permite aprovechar esas ventajas inalámbricas, con cuatro canales de frecuencia 802.11ac. Según explica la compañía la tecnología permite a los usuarios permanecer conectados y listos para trabajar en cuanto se sientan en su puesto de trabajo. Esta tecnología inalámbrica, segura y fácil de administrar, está basada en la tecnología Intel Wireless Gigabit y permite a los sistemas conectarse automáticamente a monitores, teclados, ratones y accesorios USB, eliminando la necesidad de docks mecánicos convencionales