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Rambus, que tradicionalmente es una empresa diseñadora de chip y concesora de licencias, ha entrado en el negocio de la venta de sus propios productos.  Concretamente, la empresa hará ahora competencia a varios de sus socios del canal, lanzando chips DDR4 para servidores.

Esta es una empresa muy conocida por haber tenido diversos problemas legales de patentes con grandes fabricantes de la industria. Rambus, desde su creación,  diseña tecnología y concede las licencias pero en muchas ocasiones ha acusado a otras firmas del mercado de copiar sus creaciones y diseños.

El nuevo anuncio marca un gran cambio de ese negocio. Aunque Rambus en realidad no será quien fabrique sus propios chips, sí que se unirá a las filas de Qualcomm, Nvidia, AMD, y otros, que venden sus propias creaciones, aunque encargan la producción a terceras empresas. 

Según han anunciado desde Rambus, el conjunto de chips con el que la empresa llegará al mercado, se llamarán RB26 y parte de una familia llamada R +, diseñado para sistemas de servidores de alta capacidad. Explica The Wall Street Journal que “en los sistemas con grandes cantidades de memoria DDR4, la carga eléctrica que los propios chips de memoria le dan a un controlador de integrado del procesador limita la cantidad de memoria que se puede instalar, lo que afecta a la velocidad”.

Con esta gama de chips para servidores con los que Rambus se estrena en el mercado se quiere dar solución a este problema, permitiendo el uso de módulos DIMM registrados y Load DIMM reducidos.