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El gigante del software espera que la incorporación de seis socios europeos en su ‘HoloLens Readiness Partner Program’ anime a más clientes a comprometerse con la visión de la “realidad mixta” de la compañía.

Microsoft utiliza el término “realidad mixta” para diferenciar HoloLens de los dispositivos de realidad virtual (VR), alegando que la combinación de lo virtual y lo real permitirá nuevas aplicaciones en la industria, el entretenimiento y la educación.

HoloLens se introdujo por primera vez en el mercado en enero de 2015 y Microsoft ha querido enfatizar la naturaleza autónoma del dispositivo, que funciona con Windows 10 y un procesador de 32 bits de Intel que trabaja junto con una Unidad de Procesamiento Holográfico (HPU) que permite que el dispositivo entienda los gestos y la mirada mientras procesa el entorno alrededor del usuario, todo en tiempo real.

En Europa, Black Marble, Fundamental VR y Rewind -todos partners de Reino Unido-, se han sumado a Holoforge e Immersion, de Francia, y Zuhlke, de Alemania, al programa de Microsoft que está reclutando socios con la capacidad de ofrecer un entrenamiento práctico para ayudar a otras organizaciones a implementar HoloLens y construir aplicaciones sobre él.

“En los últimos meses, HoloLens ha comenzado a incorporar más desarrolladores y clientes comerciales de todo el mundo, incluyendo a Australia, Irlanda, Francia, Alemania, Nueva Zelanda, Reino Unido y Japón”, ha afirmado Lorraine Bardeen, de Microsfot.

“Los clientes de estas regiones necesitan socios en los que puedan confiar para crear el futuro de experiencias de realidad mixta. A medida que más compañías comprenden sus beneficios e implementan HoloLens, están buscando un amplio conjunto de opciones para ayudar a crear e implementar aplicaciones de realidad mixta”, ha enfatizado la directiva.

Entre los clientes que ya están utilizando HoloLens se incluyen Audi, thyssenkrupp, Airbus y la NASA -que está utilizando el sistema para diseñar una nave espacial y los rovers-. Los clientes de las seis empresas europeas admitidas incluyen organizaciones como Red Bull Air Race, la Policía de Reino Unido y Alstom.